
Zapateros, oficio que se niega a desaparecer
Alejandro Narváez Ibarra, 11 de diciembre de 2024
Tres Valles, Ver.- En la Cuenca del Papaloapan, los zapateros remendones siguen trabajando sin cesar. Con la ayuda de tecnologías mecánicas modernas, estos artesanos reparan y dan nueva vida a zapatos de todos tipos, desde escolares hasta de vestir. La mayoría de sus clientes son amas de casa, quienes administran la economía familiar y buscan reparar en lugar de comprar nuevo.
La reparación de zapatos escolares es una de las líneas de ingresos más lucrativas para los zapateros, especialmente durante la época de aguinaldos, cuando la demanda de calzado aumenta. Sin embargo, las cadenas de zapaterías aprovechan esta oportunidad para aumentar los precios, lo que afecta a las familias de bajos recursos.
A pesar de esto, los zapateros remendones siguen siendo una opción accesible y confiable para muchos. En cada barrio hay un artesano zapatero capaz de reparar o fabricar zapatos completos, según el pago. Esto afecta a las mercadotecnias comerciales, ya que los clientes prefieren la calidad y el precio de los zapateros remendones. Así, este oficio sigue siendo una tradición que se niega a desaparecer y sigue siendo una opción viable para muchos.