Xalapa, Veracruz, México, a lunes 23 de diciembre de 2024

Ya pueden despedir a los maestros faltistas

Ya pueden despedir a los maestros faltistas

, 12 de septiembre de 2013

 Con la Ley General del Servicio Profesional Docente, que hoy entra en vigor, la disposición de despido automático por tres faltas injustificadas aplicará el próximo miércoles para los maestros en paro que no regresen a sus labores frente a grupo a más tardar el martes.

El servidor público del sistema educativo nacional, el personal docente  (…) que incumpla con la asistencia a sus labores por más de tres días consecutivos o discontinuos, en un periodo de treinta días naturales, sin causa justificada, será separado del servicio”, señala el artículo 76 de la ley docente.

Esa disposición legal sujeta por igual a los maestros con base definitiva y de nuevo ingreso.

Los docentes que están en protesta en el Distrito Federal desde hace tres semanas, por ejemplo tienen sólo hoy, mañana y el martes —el lunes es día de descanso obligatorio— para regresar a sus aulas; de lo contrario rebasarán los tres días de tolerancia que tienen en septiembre para ausentarse de sus labores sin justificación.

Al respecto, los coordinadores de los grupos parlamentarios en el Senado señalaron que la nueva legislación deberá cumplirse.

Jorge Luis Preciado, del PAN, recordó que los estados deberán aplicar las disposiciones legales. “El gobierno debe empezar a meter estas medidas y lograr que la mayoría de los profesores que sí quieran trabajar, que sí quieran dar clases regresen a las aulas”.

Despido a faltistas, desde el miércoles

La Ley General del Servicio Profesional Docente entrará en vigor hoy, por lo que la disposición de despido automático por tres faltas injustificadas aplicará a partir del próximo miércoles para los maestros en paro que no regresen a dar clases a más tardar el martes 17 de septiembre, pues esa medida considera por igual a los docentes con base definitiva que a los de nuevo ingreso.

De acuerdo con el artículo 76 de la llamada ley docente, “con el propósito de asegurar la continuidad en el servicio educativo, el servidor público del sistema educativo nacional, el personal docente y el personal con funciones de dirección o de supervisión en la educación básica y media superior que incumpla con la asistencia a sus labores por más de tres días consecutivos o discontinuos, en un periodo de treinta días naturales, sin causa justificada, será separado del servicio”.

Así, los maestros y comisionados que están en protesta en el Distrito Federal desde hace tres semanas tienen sólo jueves, viernes y martes   –el lunes 16 de septiembre es día de descanso obligatorio–   para regresar a sus aulas, pues de lo contrario rebasarán los tres días de tolerancia que tienen en el mes, en este caso septiembre, para ausentarse de sus labores sin justificación.

La nueva ley precisa que este cese podrá realizarse “sin responsabilidad para la Autoridad Educativa o para el Organismo Descentralizado, y sin necesidad de que exista resolución previa del Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje o sus equivalentes en las entidades federativas”.

La semana pasada, en entrevistas con diversos medios de comunicación, el secretario de Educación Pública, Emilio Chuayffet, recordó que a partir de la entrada en vigor de la Ley General del Servicio Profesional Docente “si faltas tres días consecutivos dejas el servicio; si faltas tres días de manera discontinua en un periodo de un mes, dejas el servicio. Si no acudes a las evaluaciones o no acudes a los servicios de capacitación, dejas el servicio (…) Es la ley”.

El martes pasado, durante la ceremonia de promulgación del paquete de reformas educativas, el titular de la SEP recordó que la “calidad no es pensar en abstracto, es hacer efectivo que los alumnos tengan mejores maestros, que estén más tiempo en los planteles para que su formación sea más completa, que tengan acceso a alimentos sanos y nutritivos, que cuenten con mejores libros de texto y materiales educativos y que sus escuelas tengan instalaciones adecuadas y en buen estado.

El maestro es el determinante más importante que incide sobre el logro académico de los alumnos, por esta razón y gracias a la reforma promovida por el Presidente, la educación de nuestros escolares estará en manos de aquellos que demuestren ser los mejores para enseñar”, destacó.

Ayer fueron publicadas en el Diario Oficial de la Federación las leyes secundarias de la Reforma Educativa.

Se trata de las leyes del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación, la General del Servicio Profesional Docente y la General de Educación.

Piden cumplir la ley

Interrogados respecto de la disposición del despido automático de los profesores faltistas, los coordinadores parlamentarios en el Senado recordaron que la ley se debe cumplir.

“Sin duda. Ayer (el martes pasado) se promulgó la ley. El maestro que falte por tres días será dado de baja. Eso dice la ley y hay que cumplir las leyes de este país (…) Lo que hay que averiguar es si son los maestros o son los comisionados sindicales, que todos ustedes saben que hay un número importantísimo de comisionados que pueden salir a la calle.

Estoy seguro que el 95% de los maestros está dando clases en este momento y está ayudando a las niñas y a los niños, a los jóvenes de México a ser mejores”, destacó el priista Emilio Gamboa.

Por su parte, el coordinador de los senadores del PAN, Jorge Luis Preciado, recordó que al haber entrado en vigor la ley “los estados deben empezar a aplicarla; es decir, si no van a trabajar durante tres días seguidos en un mes sin causa justificada, pues se les debe despedir.

Si faltan un día, pues no se les debe pagar. A partir de la promulgación de la ley, aquellos que están comisionados, que son casi 100 mil, no pueden cobrar su comisión; tienen que irse a comisión sin goce de sueldo”, resaltó.

El panista consideró que el gobierno debe empezar a aplicar estas medidas y lograr finalmente “que la mayoría de los profesores que sí quieran trabajar, que sí quieran dar clases, que sí se quieran capacitar, pues regresen a las aulas”.

Una ley una vez puesta en vigor tiene que aplicarse, pero tiene también que revisarse el impacto social de la misma, por eso hemos dicho repetidamente que más allá de ser instrumentos jurídicos, no fueron instrumentos políticos al no provenir del diálogo (…) Puesta en vigor (la ley) la autoridad tiene que aplicarla, ejecutar; pero, repito tiene que medirse el impacto social de todo esto”, añadió a su vez Miguel Barbosa, líder de los senadores del PRD.