Voladores de Papantla, el sincretismo de la región totonaca

, 18 de diciembre de 2013

Papantla, Ver., 18 de diciembre de 2013.- En el corazón del Totonacapan, con aroma de vainilla y tierra de voladores, Papantla es un “pueblo mágico” que con el pasar de los años se ha caracterizado por su sincretismo religioso.

Con la llegada de los misioneros hace cinco siglos se estableció un vínculo que se refleja en las celebraciones religiosas, una mezcla de las costumbres indígenas con las impuestas por los misioneros.

La fiesta de Corpus Christi (cuerpo de cristo) es una festividad religiosa que refleja el sincretismo de Papantla, pues se realiza cuando lo marca el calendario litúrgico con el fin de tener buenas cosechas.

La unión de estas culturas tuvo como resultado una de las festividades más importantes de Veracruz que enaltece las raíces más profundas de la cultura de los pueblos del Totonacapan.

Al atrio de la parroquia aparecen los danzantes desde diferentes comunidades para conmemorar el Corpus Christi… tapizan con colores y sonidos que engalanan la danzas de los negritos, quetzales y guaguas.

El ritual de la danza de los voladores que vive a través del tiempo no puede faltar. En un poste de 30 metros asegurados sólo por una cuerda atada alrededor de sus cinturas, estos hombres se convertirán en aves por unos minutos, sintiendo solamente el cobijo del aire.

Los voladores representan los cuatro puntos cardinales y el caporal es el que más sorprende, y que tiene que mantener el equilibrio mientras se balancea en una plataforma de madera estrecha sin cuerda alguna.

Un ritual prehispánico que representa la fertilidad mediante el descenso de los danzantes, que simbolizan la caída de la lluvia.

Papantla es cultura, religión, festividad y alegría, un pueblo mágico que lleva tatuada la mezcla de la religiosidad con sus raíces prehispánicas.