Primera encíclica del Papa Francisco destaca al amor

Excélsior, 5 de julio de 2013

-El Papa Francisco emitió el viernes su primera encíclica con un mensaje sobre la importancia de la fe cristiana que indicó que no tiene planes de alejarse radicalmente de la doctrinaria postura de su predecesor Benedicto XVI.

«Lumen Fidei» (Luz de Fe) fue pensada originalmente para formar parte de una serie de Benedicto sobre las virtudes teológicas, luego de encíclicas anteriores sobre amor y esperanza, pero no se completó a tiempo antes de su sorpresiva renuncia en febrero.

Una encíclica es una carta dirigida a los obispos y los creyentes en la que se difunden los puntos de vistas del Papa sobre cuestiones doctrinarias y otros temas

En el documento de 82 páginas, Francisco remarcó el rol de la fe cristiana como una defensa contra la «amnesia masiva de nuestro mundo contemporáneo», causada por la excesiva confianza en la tecnología y las «verdades subjetivas de los individuos».

«Cuando la fe está debilitada, las bases de la humanidad también corren riesgo de debilitarse», indicó el Papa en un texto publicado tres días antes de su visita a Lampedusa, una pequeña isla del sur de Sicilia donde han muerto miles de desesperados inmigrantes del norte de África que intentaban desembarcar en ella.

Francisco, el primer Papa latinoamericano, ha impuesto un tono más amigable y moderado que el de su cerebral predecesor alemán y se ha negado a ocupar los suntuosos departamentos papales y ha rechazado muchas cuestiones ceremoniales con las que Benedicto XVI parecía deleitarse.

La encíclica llega en un momento en que la Iglesia afronta problemas por el escándalo del Banco del Vaticano tras el arresto de un importante clérigo y la renuncia de dos destacados gerentes de la institución, conocida formalmente como el Instituto para las Obras de Religión (IOR).

El nuevo Papa ya conformó una comisión de investigación para mantener el control sobre los problemas en el IOR. Limpiar una institución notoria por su falta de transparencia será uno de los desafíos más complicados para Francisco.

He recogido el fino trabajo (de Benedicto) y sumé algunas contribuciones propias», escribió el actual Sumo Pontífice sobre la elaboración de la encíclica.

 

Francisco confirmó la definición de la Iglesia sobre el matrimonio como «la unión estable de un hombre y una mujer», aunque no hizo comentario directo sobre el tema de las uniones homosexuales, que han provocado fuertes divisiones en países como Francia y Estados Unidos.