Muere Enrique Muñoz, el reo eterno de «El calabozo»
Notimex, 27 de junio de 2019
México.- El colaborador de los programas El calabozo, Matutino Express y Expreso de la Mañana, Enrique “Quique” Muñoz, conocido como «El Reporteronte», falleció este jueves los 56 años por insuficiencia renal.
El conductor Esteban Arce dio a conocer la noticia de la muerte de su compañero en la emisión Expreso de la Mañana, de Foro TV, a través de sus redes sociales, mientras que Jorge “El Burro” Van Rankin informó en el programa Hoy la causa del deceso.
“Se fue nuestro compañero y amigo Enrique Muñoz, más de 25 años trabajando juntos, deja en nosotros un recuerdo imborrable de amistad y cariño, te voy a extrañar Gordo. Mis oraciones y eterno agradecimiento ¡Adiós Quique! Que Dios te reciba”, escribió Arce en redes sociales.
A su vez, “El Burro” Van Rankin informó que Muñoz formó parte del equipo de Esteban Arce, con quien colaboró en radio y televisión por más de 25 años. En la emisión Matutino Express hizo cápsulas y reportajes con un toque de humor.
De acuerdo con ForoTV, el periodista Enrique Muñoz nació el 22 de noviembre de 1962, y a los 17 años fundó Strong’s, una agrupación de música para eventos sociales.
Enrique Muñoz pidió la oportunidad de entrar a trabajar a los medios durante una reunión a la que asistieron Alejandro González Iñárritu, entonces ejecutivo de WFM, y los locutores Charo Fernández, Martha Debayle, Jorge “El Burro” Van Rankin y Esteban Arce.
Su primera labor en Televisa Radio fue de fonotequista, trabajo que consideró uno de los mejores de su vida, pues era el encargado de la música en el horario de la madrugada y fines de semana.
En WFM, el productor Guillermo del Bosque lo invitó a formar parte de la producción El calabozo, que se transmitía de lunes a viernes en Telehit, con Esteban Arce y “El Burro” Van Rankin.
Muñoz tuvo una mayor presencia en los medios con su participación en El calabozo, donde aparecía vestido de bandido y tras las rejas de una cárcel improvisada en el estudio.
En el programa, que destacó en la televisión mexicana por romper los esquemas de lo que se transmitía en la década de los años 90, “Quique” era el preso que purgaba su condena en la televisión y lanzaba retos como “la guerra de tortas”.
Aunque producido con bajo presupuesto, la emisión se mantuvo cerca de cuatro años al aire con una buena aceptación del público, pues era lo más irreverente que se podía ver en ese entonces en la televisión nacional.
Mientras que en Matutino Express, ahora Expreso de la Mañana, presentaba notas chuscas y se divertía cuando no ponía atención a lo que Esteban Arce decía y simulaban agarrarse a trancazos.