Más de dos millones de jóvenes mexicanos viven con depresión
Notimex, 11 de octubre de 2018
México.- La ansiedad y depresión son los principales problemas de salud pública en jóvenes mexicanos, que afecta principalmente a mujeres, advirtieron especialistas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
José Javier Mendoza Velásquez, coordinador de Investigación del Departamento de Psiquiatría y Salud Mental, de la Facultad de Medicina, afirmó que en la mayoría de los casos las enfermedades mentales comienzan antes de los 14 años, y que por lo general no son detectadas y atendidas.
El número de jóvenes mexicanos entre 12 y 24 años con depresión, es de aproximadamente 2.5 millones, según informaron a través de un comunicado de la máxima casa de estudios en el marco del Día Mundial de la Salud Mental, que se celebra este 10 de octubre.
Mendoza Velásquez destacó que en ocasiones esta situación de este sector de la población se dificulta por los casos de ciberacoso, ya que a través de las redes sociales se ven agredidos con publicaciones ofensivas o humillantes.
Claudia Fouilloux Morales, coordinadora de Enseñanza del mismo Departamento, afirmó que a veces los jóvenes afectados por estos trastornos tardan hasta 14 años en recibir atención médica, lo que los conduce a un futuro incierto.
Los especialistas universitarios precisaron que una de las estrategias para favorecer la autoestima y resiliencia en los jóvenes es enseñarles desde la infancia a resolver problemas y fomentarles hábitos saludables como hacer ejercicio, alimentarse bien y dormir lo suficiente.
Añadió que en los hombres es más complicado detectar estos problemas, pues para ellos es difícil manifestar sus emociones, y cuando piden ayuda la situación puede ser grave.
Silvia Ortiz, quien es jefa del Departamento de Psiquiatría y Salud Mental, comentó que desde hace tiempo la Organización Mundial de la Salud invita a reconocer la importancia de crear resiliencia mental desde edades tempranas para hacer frente a los retos del mundo moderno.
Subrayó que aunque en la adolescencia se presentan cambios de humor que van de la tristeza al enojo en poco tiempo, una clave para detectar en ellos un problema más serio es que pasen hasta dos semanas deprimidos o tristes.
Dijo que entre los síntomas de detección se encuentran comer y dormir mal, enfrascarse en actividades nocturnas y al día siguiente tener somnolencia, o dormir demasiado y comer compulsivamente.
Reconoció que las instituciones son insuficientes para crear consciencia sobre estos problemas, por lo que es necesario reforzar la prevención, promover la salud mental y atender en familia las necesidades de los jóvenes.