La Mancha, una costa sustentable
, 17 de julio de 2015
La Mancha, una costa sustentable
Una comunidad costera sustentable es aquella que busca minimizar el impacto destructivo en los sistemas naturales y en el ambiente, que busca crear lugares perdurables y de alta calidad de vida y construir comunidades socialmente justas, donde las necesidades de todos los grupos sean consideradas.
El Plan de Manejo La Mancha-El Llano está integrado por pobladores de la zona costera de Actopan, en conjunto con integrantes del Centro de Investigaciones Costeras de La Mancha del Instituto de Ecología.
La iniciativa tiene el objetivo de llevar a la práctica la conservación de los ecosistemas, con base en una visión integral y activa que involucra la participación de diversos actores en el proceso de cambiar para vivir.
Todo ello permite desarrollar investigaciones sobre humedales, playas y dunas, así como vincular sus resultados con la conservación y el desarrollo de alternativas sustentables de manejo, en un escenario de cambio climático.
El Plan de Manejo La Mancha-El Llano se desarrolla en la costa del municipio de Actopan, ubicado a 60 kilómetros al norte del puerto de Veracruz.
Abarca 32 kilómetros de costa y comprende las cinco microcuencas que alimentan las lagunas La Mancha, El Llano y El Farallón, así como los ríos Limón y Agua Fría. Parte de la zona fue declarada humedal prioritario ramsar número 1336, en febrero de 2005.
Plan de manejo comunitario
El Plan de Manejo Comunitario La Mancha-El Llano ha sido un esfuerzo de investigación y desarrollo sustentable con objeto de conservar la biodiversidad, mantener los ecosistemas y mejorar la calidad de vida de los habitantes de la costa del centro de Veracruz.
Dio inicio en 1997 y a partir de ese momento se estableció un vínculo con actividades de los productores de las cuencas cercanas para desarrollar mejores prácticas de manejo y conservación del entorno.
Al ver un panorama nada alentador con ecosistemas costeros, principalmente humedales y dunas a punto de desaparecer, se desarrolló este proyecto en el que destacan las alternativas productivas vinculadas al medio ambiente.
Éstas permiten a los grupos de pobladores preservar su forma de vida y su relación con la naturaleza, pero con una mayor calidad de vida al sumar la conservación, la restauración y la protección de la naturaleza a las actividades productivas, así como el desarrollo de instrumentos para incorporar en las actividades y proyectos a grupos marginados como las mujeres y los niños.
Costa sustentable
Las experiencias de investigación y de acción comunitaria desarrolladas en la región de La Mancha han permitido que se muestre como un referente, una costa sustentable que engloba la investigación, el manejo de recursos y el desarrollo comunitario.
El proyecto de La Mancha como una costa sustentable representa un enfoque de investigación y participación comunitaria sobre la planicie costera veracruzana, que busca desarrollar la investigación y generar la información necesaria para instrumentar acciones de conservación y de restauración, así como planes de manejo comunitarios de los ecosistemas costeros locales.
Y es que Veracruz es un estado rico en ecosistemas costeros por su variedad y extensión, sobre todo en humedales arbóreos, como selvas inundables y manglares, y herbáceos, como popales y tulares.
Se trata de ecosistemas muy productivos, que proporcionan recursos pesqueros y prestan servicios ambientales de gran importancia para la sociedad; sin embargo, están siendo desecados y cubiertos con pastos africanos para criar ganado.
Las dunas cubren grandes extensiones formando extensos campos de arenas móviles, otras han sido estabilizadas con pastizales y selvas rodeando lagos interdunarios de agua dulce.
Albergan un gran número de especies, pero están amenazados por los desarrollos turísticos y el crecimiento de las ciudades.
Las playas también están bajo fuerte presión turística y en muchos lugares presentan erosión intensa; las dunas y las playas juegan un papel fundamental en la protección de la zona costera durante los nortes y huracanes.
Proyectos productivos
En La Mancha se han desarrollado proyectos que involucran a los propios pobladores organizados previamente, quienes desarrollan una actividad productiva alternativa que les permite elevar sus ingresos mediante una actividad sustentable.
Eco Guías en Movimiento, una empresa integrada en sociedad de solidaridad social y conformada por un grupo de hombres y mujeres con vínculos familiares, se ha constituido en una microempresa de ecoturismo que guía grupos de visitantes en la zona de La Mancha, como parte del plan de manejo.
Ofrecen paseos guiados a lo largo de senderos interpretativos que visitan la laguna La Mancha, el manglar, los humedales de agua dulce, la playa, las dunas y la selva, espacios que durante años fueron utilizados para la ganadería, y que ahora proporcionan servicios guiados para observación de aves o la migración del cangrejo azul y hasta paseos en kayak.
Los miembros de este grupo se han convertido en líderes comunitarios que promueven la conservación en su comunidad y el conocimiento de la naturaleza. Y, no solo eso, guían a los niños de las escuelas de la zona explicándoles la importancia de los ecosistemas y su biodiversidad y la necesidad de conservarlos.
Las mujeres de la comunidad se organizaron para formar el Grupo del Vivero de la Mujer Campesina, una sociedad de solidaridad social dedicada al cultivo y reproducción de especies de plantas nativas para la reforestación y restauración de distintos tipos de ecosistemas, como selvas bajas y medianas, manglares y humedales.
Conservación y comunidad
Los planes de manejo han permitido la restauración de humedales en conjunto con las comunidades en varios de los sitios de trabajo donde se han desarrollado diversas experiencias de reforestación.
Se desarrolló un proyecto con un grupo comunitario en La Mancha para enriquecer los acahuales de las dunas con especies nativas de árboles.
Desde 1998 se han realizado campañas de vigilancia y evaluación de poblaciones del cangrejo azul, una especie en peligro de extinción, con el fin de evitar la captura ilegal, principalmente de las hembras; incluso, se logró evitar su desaparición con la creación de comités de vigilancia conformados por pescadores, agricultores, ganaderos e integrantes de los grupos productivos del plan de manejo.
Ahora quienes cazaban al cangrejo azul lo protegen y son ellos quienes promueven campañas contra la cacería ilegal con pláticas informativas, cursos comunitarios, la colocación de letreros y la visita directa a cazadores en la zona.
Es así que el proyecto La Mancha-El Llano ha convertido en este sitio en una costa sustentable. De ver cómo se perdían los humedales y selvas, se impulsó la actividad de organización a distintos niveles y con objetivos claros por conservarlas de forma sustentable, involucrando a los habitantes, desde los niños hasta las mujeres, para establecer proyectos productivos que les brindan ingresos.
Hoy los ejidatarios, ganaderos y pescadores limpian y rescatan el arroyo que alimenta al manglar, porque estos hombres no se cansan de recorrer los senderos en los manglares y en las selvas inundables, porque protegen al cangrejo azul que muchos ya ni lo conocían.
Todo un proyecto basado en la educación ambiental y en la capacitación. La Mancha es una oportunidad para dejar un mundo mejor de cómo lo encontramos.