Hollande, presidente francés, promete ejemplaridad tras escándalo por desvío de recursos

RFI, 3 de abril de 2013

El presidente Hollande reconoció este 3 de abril que la inculpación de su exministro Jérôme Cahuzac por blanqueo de fraude fiscal constituye una ‘grave infracción a la moral republicana’. El mandatario declaró que Cahuzac no contó con ninguna protección de parte de las autoridades y anunció medidas para prevenir este tipo de hechos.

El presidente Hollande manifestó este miércoles que Jérôme Cahuzac “engañó a las más altas autoridades del país”, lo cual es un “insulto a la Republica”, sobre todo porque los hechos que se le reprochan son “intolerables: poseer una cuenta no declarada en el extranjero”.

El presidente aseguró que Cahuzac no había gozado de ninguna protección, aparte de la presunción de inocencia. Hollande aclaró que Cahuzac había abandonado el gobierno porque él se lo había pedido, luego de que se abriera una instrucción judicial en su contra. En el momento de la renuncia del ministro del Presupuesto, el pasado 11 de marzo, la presidencia había dado otra versión de los hechos, a saber, que Cahuzac había renunciado para ocuparse de su defensa.

En una breve intervención televisada pregrabada, el jefe de Estado francés anunció o confirmó tres medidas: el fortalecimiento de la independencia de la justicia, una lucha “sin cuartel” contra los conflictos de intereses privados y públicos, la prohibición de todo mandato público para los políticos elegidos que hayan sido condenados penalmente por fraude fiscal o corrupción.

Sobre la lucha para impedir los conflictos de intereses, Hollande precisó que presentará un proyecto de ley sobre la publicación del patrimonio de los ministros y los parlamentarios. El presidente afirmó que la ley en cuestión está destinada a “luchar de manera implacable contra los conflictos entre los intereses públicos y los intereses privados, y a asegurar la publicación y el control sobre los patrimonios de los ministros y los parlamentarios”.