Haitiano trabaja como palapero en playa Villa del Mar de Veracruz
Carlos Navarrete, 23 de noviembre de 2021
Veracruz, Ver.- Por ser extranjero y no contar con papeles que legalicen su estancia en Veracruz, a Carlens Fortuen le cerraron las puertas de varios negocios que visitó en busca de trabajo.
“Yo fui a todos lados, metí papeles y me dijeron que no. Tú sabes que con la gente no todos son iguales, algunos son buenos y otros no, y allá en el otro lado fui y me dijeron que no nos iban a dar trabajo a nosotros, que solamente a mexicanos, no toda la gente es igual”.
Hace un mes que llegó a la ciudad acompañado de su esposa y de su hijo. Viajó desde Chile a Veracruz con los ojos bien puestos en Estados Unidos, sin embargo la burocracia en el Instituto Nacional de Migración (INM) frenó sus aspiraciones.
Con una renta y alimentación que pagar, se aventuró a salir a las calles. En las palapas de playa Villa del Mar le dijeron no, hasta que llegó al restaurante “Buchaca”, propiedad del ex rey del carnaval, Víctor Morales Azamar, quien confió en él, le dio una guayabera, una franela y lo empleó como palapero.
“Le di chamba a un haitiano que vino a pedir trabajo y le dije que sí, que cómo no. Yo sinceramente pensé que no iba a venir más porque el primer día le fue un poquito mal pero no, él me dijo yo vengo, yo vengo y ya lleva una semana y le ha ido bien”.
En Chile, Carlens trabajó durante años como parrillero, así que conoce el negocio de los restaurantes.
Con apenas una semana como palapero, se ganó el cariño de sus camaradas.
“Todavía no sé, pero estaría bien si me puedo quedar aquí, pero si la vida no es tan mejor y pues sí o no, pero todavía no sé. Y sin papeles no se puede ir a ninguna parte, tengo que tener papeles”.
Carlens se convirtió en el primer palapero de origen haitiano que trabaja en Playa Villa del Mar. El ciudadano de 29 años de edad dijo que esperará a recibir sus documentos para ver si continúa su viaje con dirección al norte del país o si se queda en Veracruz donde, por lo visto, se siente a gusto.