Habitantes de Chicontepec realizan ofrenda del Xantolo

Héctor Juanz, 18 de octubre de 2023

Xalapa, Ver.- Este 18 de octubre, en el Día de San Lucas, los habitantes de la huasteca veracruzana hacen ofrenda a los fieles difuntos correspondiente a la fiesta del Xantolo o Todos Santos.  

“La gente desde ayer comenzó a hacer tamales, los dulces de calabaza, los camotes, la yuca, entonces hoy por la mañana la gente acude a la iglesia, en la parte de Chicontepec y en muchas comunidades, ahora se hace un rosario en la iglesia y una ofrenda, pero también en sus casas desde muy temprano la gente se levanta, adorna el altar y pone la ofrenda, hoy es el día de San Lucas, el comienzo del Xantolo.  

La fiesta de Todos Santos que es de las más representativas en nuestro país tiene una particularidad en el norte de Veracruz, pues se celebra en grande.

En la sierra de Chicontepec y Huayacocotla se hace con mayor misticismo, pero en Tempoal y Tantoyuca como en la huasteca de Hidalgo y San Luis Potosí las ofrendas se acompañan con música y baile en comparsas donde la gente se caracteriza para danzar al ritmo de “la viejada”, los ensayos empezaron esta semana. 

“Se hacen por barrios, por colonias, cada comparsa representa una colonia de la localidad de Tempoal. Los ensayos comienzan a partir de esta semana y durante dos semanas que comienza la fiesta del Xantolo para los bailes de La Viejada, el 31 de octubre con la participación de los niños. El 1, 2 y 3 de noviembre es para la gente mayor. El día 3 se acostumbra ir al cementerio con las comparsas, bailar en las tumbas, acompañar con los difuntos y regresar al templete.  

Difundiendo la participación de la población desde las infancias es como estas fiestas y tradiciones de Todos Santos se mantienen vivas.   

“En mi tierra, Tempoal, los niños empiezan a bailar desde preescolar y de ahí se sigue primaria, secundaria y bachillerato y se hacen concursos para darles un premio a los que mejores baila. Es una tradición que vienen de años, es un legado que nos dejan nuestros padres y abuelo”.  

Es así que el sincretismo se hace presente en nuestra cultura, con el amarillo del cempasúchil, el verde de las ramas tinajas y el vivo color de la flor de terciopelo que adorna los altares, con las velas que desde ahora se mantienen encendidas para guiar las almas y los aromas del copal y las ofrendas, además del sonido del violín huasteco.