Enrique Peña Nieto promulga la Ley de Amparo
Excélsior, 2 de abril de 2013
En Palacio Nacional, el mandatario promulgará la normativa mencionada, que fue avalada el 20 de marzo en el Senado
La nueva Ley de Amparo coloca al ciudadano en el centro de la escena, pues ahora podrá ampararse frente a normas generales, actos u omisiones de la autoridad que atenten contra sus derechos humanos, expuso ayer el presidente Enrique Peña Nieto en Palacio Nacional.
“Cuando una legislación es rebasada por el avance colectivo es indispensable actualizarla, ponerla en sintonía con las nuevas necesidades sociales y con los estándares internacionales.
“Éste es el espíritu detrás de la expedición de la nueva Ley de Amparo, que al colocar al ser humano y a sus derechos como causa y fin da un nuevo aliento a una de las más destacadas aportaciones mexicanas al mundo jurídico”, dijo Peña Nieto al promulgar esa legislación.
Destacó que esa ley es producto de un “esfuerzo colectivo; es justo decir que la nueva Ley de Amparo es un mérito de todo el Estado mexicano”.
El titular del Ejecutivo indicó que ahora se eleva la eficacia de la justicia mexicana, “pues la sentencia de todo amparo para efectos señalará con precisión los términos en que deba cumplirse y evitar así remisiones recurrentes que sólo dilataban la justicia”.
El presidente del Senado, el panista Ernesto Cordero, consideró a su vez que “se abre la posibilidad de que cuando una norma general sea señalada como inconstitucional a partir de juicios de amparo, deje de aplicarse con efectos generales. Se trata de un paso fundamental en la construcción de un sistema legal que garantice de manera efectiva la justicia para todos”.
Al respecto, el presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Juan Silva Meza, expresó que “actuando con prudencia, con equilibrio, sin desbordamientos, no avalaremos ni regresiones ni desviaciones al interior respecto del nuevo paradigma; nuestra labor está marcada por la defensa del interés público que consiste en salvaguardar a las personas de los abusos en que las autoridades incurran en el ejercicio de sus encargos”.
El ministro dijo que la nueva Ley de Amparo, que tiene la normatividad para armonizar el sistema constitucional que se aprobó en 2011, busca “obligar a todas las autoridades a sujetar su actuación al principio de protección y salvaguarda de los derechos humanos de las personas, en especial en beneficio de los más vulnerables”.
Juan Silva Meza convocó además a los juzgadores federales a aplicar la nueva ley “sin regateos ni titubeos”.
Un elemento nuevo de dicha ley es que una sentencia de amparo puede culminar en la declaración de inconstitucionalidad de alguna norma general, esto por parte de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Otro cambio es que cuando la autoridad decida frenar la construcción de una obra porque se viola un reglamento ambiental y la empresa se ampara, el juez deberá decidir si suspende o no la decisión de la autoridad.
Para tomar esa decisión, se establece que deberá tener como criterio central el interés de la sociedad por encima del manifestado por la empresa.