Xalapa, Veracruz, México, a sábado 23 de noviembre de 2024

En México existen 2.3 millones de personas con discapacidad auditiva

Mahaleth Guevara Alamilla, 15 de abril de 2024

Veracruz, Ver.- En común observar en las plazas, parques y calles a personas portando audífonos, a través de los cuales se aíslan del ruido del entorno, para disfrutar de la calidad del sonido el volumen suele ser alto.

De acuerdo con el otorrinolaringólogo con especialidad en otología, Alejandro Espinosa Rey la exposición constante al ruido alto puede generar la pérdida irreversible de la audición.

“El oído está preparado para soportar ciertas intensidades de ruido, pero solamente durante tiempos muy limitados, entonces cuando nosotros empezamos a acostumbrar a nuestro oído a estar expuesto a ruidos muy intensos sin darnos cuenta, lo estamos lastimando poco a poco esto a fin de cuentas se conoce como una hipoacusia inducida por ruido o un trauma inducido por ruido y lo más importante que hay que destacar de esto es que es una pérdida que es completamente irreversible”.

El escuchar sonidos a más de 90 decibeles, puede provocar daños en el oído.

Entre las alternativas para la rehabilitación auditiva se contemplan: tratamientos farmacológicos, auxiliares auditivos y la cirugía de implante coclear.

“El implante coclear es un dispositivo electrónico capaz en la actualidad de restablecer uno de los órganos de los sentidos que en este caso es la audición, tenemos en la actualidad incluso implantes de conducción, o sea, es decir para pacientes que nacen con malformaciones de los oídos o que durante el desarrollo de su vida llegan a presentar problemas ya sea infecciosos tumorales o de alguna otra índole en el oído, o sea, tenemos también prótesis que son prótesis milimétricas que sustituyen la función de alguno de los huesos de nuestro ídolo medio”.

En el sector salud privado una cirugía de implante coclear oscila entre los 700 y 800 mil pesos.

Lo ideal es la prevención, el especialista señaló que se debe hacer conciencia en el volumen y el tiempo de exposición de los ruidos y sonidos para evitar riesgos al oído.