El futuro de México, promisorio, de éxito y oportunidades: Peña Nieto

Excélsior, 23 de octubre de 2013

En medio del debate por la reforma fiscal en el Senado de la República, el presidente Enrique Peña Nieto defendió su agenda de reformas e insistió en que “éste ha sido el año de colocar los cimientos para impulsar el desarrollo del país” y no para buscar popularidad.

“No hemos venido trabajando para estar bien ni en las encuestas, ni bien medidos en la popularidad; soy el primero en reconocer y en asumir que México necesitaba hacer estos ajustes y estas transformaciones, modificar su andamiaje jurídico. Lo estamos logrando”, dijo el mandatario federal.

Al participar en México Cumbre de Negocios, el Ejecutivo federal anunció que no daría el discurso que tenía preparado: usaría el espacio para hacer un recuento de su primer año de gobierno.

Argumentó que si además de las reformas que ya se aprobaron, se aprueban la fiscal y la energética “los cimientos que estaremos logrando serán muy firmes y sólidos”, para alcanzar mayor crecimiento social y económico, aseguró.

Reconoció que el crecimiento del país no ha sido el esperado y expuso que esto se debe a la desaceleración de la economía mundial y al periodo de transición entre la administración pasada y ésta.

“Esto es como el corredor que entrega la estafeta a otro: uno llega corriendo y el otro arranca. Y le toma su tiempo agarrar nuevamente el ritmo”, explicó Peña Nieto ante empresarios reunidos en esta capital.

¿Por qué las reformas?

El presidente Peña Nieto aprovechó el espacio para argumentar por qué se requieren reformas estructurales en México.

Se remontó a los años cincuenta del siglo pasado, cuando se logró un crecimiento notable en el país, y mejores condiciones de vida, pero desde la década de los ochenta el crecimiento se estancó.

Desde entonces, agregó el mandatario, no se ha podido reducir el número de mexicanos que viven en la pobreza, que es de aproximadamente 42 por ciento de la población.

Y describió la última década de la economía mexicana: crecimiento insuficiente —en promedio 2.1 por ciento de crecimiento del PIB— y limitada creación de empleos, por lo que el país no puede aprovechar su bono demográfico, en donde el promedio de edad son 27 años.

El Pacto por México

Tras dibujar el desalentador panorama económico de las últimas décadas, el presidente Peña Nieto aludió al Pacto por México como herramienta para “transformar al país”.

El Pacto, dijo, “nunca ha pretendido ser sustitutivo de las facultades y atribuciones que tiene el Congreso de la Unión”, sólo el Legislativo puede aprobar leyes, aclaró.

Pero, se necesitaba un acuerdo “que midiera realmente el esfuerzo que estábamos comprometiendo” y acreditar que era posible llegar a acuerdos para lograr cambios.

Y el cambio sustancial que se requería, era transformar el marco jurídico que regula actividades centrales en la vida del país.

En defensa de las reformas

Entonces, se lanzó a hacer una defensa de todas las reformas aprobadas este año.

El Presidente empezó por la multicitada reforma educativa, y, en un mensaje a los maestros, dijo que la reforma respeta sus derechos laborales, pero exige del maestro “que tenga vocación para educar,  realmente tenga las aptitudes y capacidades necesarias”.

Sobre la reforma financiera, sostuvo que su objetivo es garantizar el crédito para las pequeñas y medianas empresas, una herramienta de desarrollo que es insustituible.

Ensalza la reforma hacendaria

En cuanto a la reforma hacendaria, argumentó que busca “cerrar los huecos”, que permitían la evasión fiscal. “Esto ha generado polémica y debate, pero yo apunto algo central de esta reforma: es una reforma con un alto sentido social” dijo.

Los recursos que se obtengan a través de la reforma se usarán para infraestructura y servicios para los sectores más marginados, y no para la burocracia, aseguró.

En el evento donde estuvo presente el gobernador de Jalisco, Aristóteles Sandoval, y el presidente de México Cumbre de Negocios, Miguel Alemán Velasco, expresó que no ha existido en la historia moderna una reforma fiscal que no provocara la incomodidad de amplios sectores de la sociedad.

“No advierto en ninguna parte del mundo, que cuando realmente se pretenda hacer una reforma hacendaria o fiscal, no toque algunos intereses y genere incomodidad en otros.”

Futuro energético

En el evento, engalanado con la presencia del futbolista Edson Arantes Pelé,el presidente Peña Nieto habló de la reforma energética, y recordó que sólo faltan dos o tres años para que Estados Unidos, principal comprador de petróleo mexicano, logre la autosuficiencia.

Y expuso que “la explotación que hace hoy —Estados Unidos— de shale gas está modificando la geografía energética de todo el mundo”, por lo que el no aprobar una reforma, dejará a México con el mismo rezago que presenta hoy, frente a otros países productores de petróleo.

Cerró su discurso exponiendo que su gobierno “no se ha apartado un ápice de la ruta que nos trazamos al inicio de la Administración” y argumentó que buscan “la transformación…no administrar la inercia”.

En el lugar, el gobernador Sandoval dijo que a diferencia de otras administraciones que “vivieron en el confort de la macroeconomía y sus indicadores”, la administración actual “no está pensando sólo en pragmatismo electoral sino en el futuro de México”.

Y agradeció al jefe del Ejecutivo que apoye el proyecto de convertir a Guadalajara en el centro de tecnologías de la información de la región, y Alemán Velasco describió a Guadalajara como el “Sillicon Valley Latinoamericano”.