Cuidado con las broncoaspiraciones y neumonías que llegan con este clima

Excélsior, 23 de diciembre de 2013

El neumólogo del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco, Rubén Santoyo Ayala, advirtió que los cambios bruscos de temperatura pueden traer consigo broncoaspiraciones y neumonías.Es muy peligroso automedicarse, no es lo mismo para todos

Por ello, exhortó a la población a prevenir infecciones respiratorias porque durante éstas, el flujo de flemas aumenta y dependiendo de su viscosidad, puede provocar broncoaspiraciones las cuales incrementan el riesgo a desarrollar neumonías químicas, atragantamientos y dificultad respiratoria.

Señaló que los menores de un año y los adultos mayores son más susceptibles a esta complicación, por lo que, ante la presencia de infecciones respiratorias aconsejó no acostar a los bebés, inmediatamente después de comer y evitar la automedicación.

Indicó que el uso de antihistamínicos, jarabes o expectorantes de flemas debe estar prescrito y vigilado por el médico, de lo contrario se corre el riesgo de broncoaspirar ante un mal manejo de estas secreciones.

«Es muy peligroso automedicarse, no es lo mismo para todos, hay que individualizar en cada paciente sobre todo en los más pequeños y más grandes por ser los más vulnerables a procesos infecciosos, cualquier medicamento, incluso antihistamínicos y expectorantes, debe usarse bajo supervisión médica», resaltó.

Explicó que al vomitar o regurgitar las flemas en combinación con los alimentos éstos pueden ser tragados y pasan a los bronquios y pulmones, dado que se trata de composiciones ácidas provocan infecciones neumónicas.

Santoyo Ayala agregó que estas neumonías químicas también son comunes en personas que ingieren bebidas embriagantes y pierden el conocimiento debido a que al producir vómito éste puede dar como resultado atragantamiento y dificultad respiratoria.

Al broncoaspirar, dijo el experto, el paciente percibe un cuerpo extraño en su aparato respiratorio lo que da como resultado el cierre de la tráquea y por consiguiente la falta de aire.

«La frecuencia respiratoria aumenta porque estás tratando de jalar el aire y a la vez te falta, te puede incluso dar una taquicardia como un efecto también secundario de la necesidad que tienes de no ahogarte», advirtió el médico del IMSS en Jalisco.

Refirió que cuando el flujo de flemas en el paciente es considerable y no puede expulsarlas por su cuenta, se procede a utilizar algunos procedimientos médicos con el fin de aspirar estas secreciones.

Incluso dijo que el proporcionar leves golpecitos en la espalda puede facilitar la adecuada expulsión de flemas en el caso de los bebés y adultos mayores.

Respecto a algunos métodos caseros como la utilización de «perillas» para el manejo de flemas en nariz y boca de los niños, manifestó que se debe realizar con precaución para no lastimar la nariz o cavidad oral del infante.