A un año del sismo de Chiapas y Oaxaca
Hugo Figueroa, 7 de septiembre de 2018
Xalapa, Ver.- Hace un año, el jueves siete de septiembre del 2017, en punto de las once de la noche con cuarenta y nueve minutos se registró un fuerte movimiento telúrico que alcanzó los 8.2 grados en la escala de Richter colocándolo en la clasificación de terremoto. Tuvo como epicentro el Golfo de Tehuantepec en Oaxaca, a 133 kilómetros al suroeste de Pijijilpan, Chiapas.
Uno de los datos que convirtieron a este fenómeno sísmico en particular, fue su duración ya que superó los tres minutos y medio, llegando casi a los 4 minutos de duración. El mismo fue percibido en gran parte del centro y sureste de nuestro país y también en naciones centroamericanas como Guatemala, El Salvador, Honduras y Belice.
Debido a su intensidad y duración se emitió una alerta de tsunami para México y algunas naciones de Centroamérica por el Centro de Alertas de Tsunamis del Pacífico.
El presidente de México, Enrique Peña Nieto activó los protocolos de protección civil implementados para estos casos de emergencia.
Datos que registró la Secretaría de Gobernación, refieren que cientos de comunidades resultaron afectadas por el terremoto de hace un año, principalmente en entidades como Chiapas donde fallecieron 18 personas, Tabasco con cuatro muertos y Oaxaca donde perdieron la vida 78 personas. Entre los municipios más dañados en este último estado, destacó el de Juchitán.
El terremoto del 7 de septiembre de 2017, también se sintió en Veracruz y la capital del estado, sin que registraran fallecimientos, lesionados o daños mayores a la infraestructura en nuestra entidad.
Alejandro Vargas, investigador del Instituto de Ingeniería de la Universidad Veracruzana, informó que aun cuando los sismómetros de Veracruz se saturaron en sus registros, el acelerómetro ubicado en el rancho veterinario “La Posta” de la Universidad Veracruzana logró captar el registro de dicho movimiento. El investigador recomendó estar conscientes de que en Veracruz también tiembla. Por ello, es importante tomar las acciones preventivas y reactivas necesarias para saber qué hacer ante un fenómeno telúrico como el del año pasado.