Educación debe aportar nueva visión de desarrollo mundial sostenible
Agencia de Noticias RTV (UV), 4 de octubre de 2024
Xalapa, Ver.- “Una de las funciones clave de las universidades es formar a las generaciones que asumirán el liderazgo de la sociedad en el futuro”, expresó Emma Juaneda Ayensa, académica de la Universidad de La Rioja, España, quien dejó en claro el deber de la educación de contribuir a una nueva visión de desarrollo mundial sostenible.
En el salón audiovisual de la Facultad de Economía de la Universidad Veracruzana (UV), a invitación de dicha entidad académica y de la Coordinación de Movilidad Estudiantil, Juaneda Ayensa dictó la conferencia “Universidad 2030: ¿cómo pueden las instituciones de educación superior ser agentes de cambio para la promoción de un modelo de desarrollo más sostenible?”.
Compartió con estudiantes y académicos algunas de las acciones implementadas en su universidad desde 2016, orientadas hacia la sostenibilidad. Por ejemplo, un proyecto de innovación docente, de desarrollo y evaluación de competencias.
Lo anterior, a raíz de la preocupación de diversos grupos de investigación sobre cómo impulsar la sostenibilidad en la universidad, pues a partir de la crisis de 2008 surgieron dudas acerca de la formación de los estudiantes y de su capacidad a la hora de tomar decisiones para no generar impacto negativo en la sociedad.
“Al momento de plantearnos la formación de los futuros y futuras egresadas y egresados, es clave transmitir no sólo conocimientos técnicos, sino también una serie de principios y valores que garanticen que esas personas asumirán el desempeño profesional desde un punto de vista más responsable con el entorno.
Por ello, uno de los propósitos de la universidad, además de la creación y gestión del conocimiento a través de la investigación básica y teórica, tiene que ver con la resolución de problemas de la sociedad.
Emma Juaneda, integrante de la Cátedra UNESCO de Ciudadanía Democrática y Libertad Cultural, de la Universidad de La Rioja, advirtió que el conocimiento no debe quedarse encapsulado, al contrario, es necesario que crezca y se transmita a las nuevas generaciones.
“Al final, nuestro producto principal es el conocimiento que se mueve a través de la sociedad, de proyectos de transferencia y de cómo se van transmitiendo hacia las nuevas generaciones.
”Nos debemos plantear que desde la educación, de esa actividad a la que nos dedicamos y sabemos hacer bien, podemos intentar solventar programas relacionadas con el modelo de desarrollo sostenible”, agregó.
De aquí surge un enfoque para todo lo que se relaciona con educación: en valores, ambiental, para el desarrollo sostenible, así como diferentes terminologías.
Reiteró el papel de las universidades y de los centros de educación superior en el desarrollo de capacidades y competencias a favor de los estudiantes para la toma de decisiones futuras en el desempeño de su actividad profesional; esto, a su vez, les permitirá ser respetuosos con el entorno o adoptar una posición de liderazgo en temas de desarrollo sostenible.