Flores son los regalos más recurrentes para el Día de San Valentín
Héctor Juanz, 14 de febrero de 2023
Xalapa, Ver.- Para muchas personas, regalar o recibir un ramo de flores es el mejor detalle en el Día de San Valentín, desde una flor suelta o los arreglos con dulces y hasta botanas, la creatividad de los comerciantes y de quienes buscan sorprender y mostrar el cariño, afecto o amor de esta manera, no tiene límites en esta fecha.
“Estamos esperando varios taxis que lleguen, algunas y hay en ruta estamos sacando más y en la parte de arriba tenemos más arreglos, prácticamente se están enviando casi 200 arreglos ahorita. Pasa por manos de una persona que hace las cajas, ensambla las cajas, arma las cajas, escribe datos, escribe tarjetas, pasa por revisión y ya se envía”, señaló Perla Jazmín Sánchez, florista.
Este 14 de febrero fue maratónico para los floristas de distintos mercados y zonas de Xalapa, además de su moto repartidores, emplearon taxis para abastecer los pedidos que abundaron para complacer a los enamorados, de esta manera hay todo un proceso y cuidado, incluso en las entregas de los arreglos o ramos.
“Tenemos que hacer las entregas a tiempo porque todos quieren no fallar con sus regalos. Son entregas como anónimas, nada más te dicen el nombre y hay que buscar a esa persona, entregar las cosas bien, sin que se derramen, porque muchas veces son líquidos, entonces sí es un poquito difícil y como lo quieren rápido”, manifestó Kevin Gómez, moto repartidor.
Este año fue más notorio el aumento en el precio de las flores, principalmente de las rosas que se vendieron hasta en 200 pesos la docena.
“La rosa y la gerbera es lo que subió de precio. Están en 200 pesos la docena. Desde el año pasado la flor estaba muy cara, por los fríos y todo eso, mucha gente decía están esperando el 14, pero no, es por los fríos, las heladas echan a perder la flor. Los jóvenes cuando salieron de la escuela vinieron y comenzaron a comprar”, comentó María Gisela, locataria Mercado Jáuregui.
Ni los precios altos, el fin de quincena o los horarios de trabajo y escuela impidieron que se regalaran flores, una antigua costumbre que aún conservan los jóvenes.