Congeladas, comunidades del Cofre de Perote
, 8 de enero de 2014
Perote, Ver., 8 de enero de 2014.- Las comunidades asentadas en las faldas del Cofre de Perote están prácticamente congeladas. Los pocos rayos solares son un verdadero alivio al frío, pero se esfuma rápidamente con el pasar de las horas.
Temperaturas bajo cero han convertido su verdor en un tapiz blanquecino por las mañanas, donde el hielo se derrite conforme avanza el sol.
El viento gélido no da tregua y por las madrugadas las cobijas no son suficientes para aguantar las bajas temperaturas.
Las chapitas han salido en el rostro de los niños, evidenciando que el frío ha hecho de las suyas; los salones están convertidos literalmente en hieleras. Más juntitos se estudia mejor, los niños ya están acostumbrados al intenso frío y van tapados hasta las orejas.
El frío no es impedimento para pastorear a los borregos, los propios habitantes saben que lo más crudo del invierno está por venir y no se descarta incluso la caída de nieve en lo más alto de la montaña en los próximos días o semanas.