Woody Allen: «La vida es muy cruel, muy difícil, muy dura, por eso trabajo tanto»
Exclusiva de RTVE, 18 de noviembre de 2013
El estreno de la última película de Woody Allen, Blue Jasmine, ha traído cola. Era de esperar, ya que muchos críticos de cine la califican como la mejor de su producción en décadas, algo que a él particularmente le da bastante lo mismo: “Bueno ¿sabes qué pasa? Cuando terminas una película, cuando está acabada, ¿qué otra cosa se puede hacer? Yo trabajo, soy un trabajador, como mi padre”.
El privilegio ha sido poder intercambiar impresiones con el propio genio capaz de escribir una historia como esta. En el momento en el que un hombre se convierte en un adjetivo está claro que se ha convertido también en una leyenda, en este caso cinematográfica.
Recordarán que ya hablamos hace como un mes con su protagonista, Cate Blanchett, y ya adelantamos entonces que la cosa iba a pegar fuerte. En Blue Jasmine, por si aún no han ido a verla, el director nos narra la historia de una mujer que sufre un doble descalabro en su existencia y que debe inventarse una vida que le es ajena hasta es e momento.
Ojo, porque apostaría mi dedo meñique por que Cate Blanchett se llevará el Óscar a la mejor interpretación femenina por este papel. Pero al margen de premios, la historia es una de esas en las que la neurosis y los picos emocionales se reflejan en la protagonista como un libro abierto. Es una de las de Allen, humor, sátira, ironía, amor, soledad, matrimonio, muerte y todo entre la comedia, el drama y la farsa.
«No pienso en mí como una leyenda»
Como algunos filósofos o escritores, han acabado dando nombre a un tipo de conducta o literatura. Woody Allen es adjetivo y es leyenda, aunque él mismo no lo admita: “Todo el mundo siente que hay zonas en las que se siente inseguro, yo he cometido fallos en mis creaciones, no pienso en mí como en una leyenda”.
Pero es indiscutible que Allen y sus películas caracterizan un cine que refleja formas de ver la vida y de enfrentarse a ella desde cualquier situación por muy marciana que sea. No es el caso de Blue Jasmine, puesto que la trama parte de un hecho que, podríamos admitir, ha dejado de ser extraordinario: la ruina de una mujer multimillonaria.
“En muchas ocasiones, leo algo en el periódico o veo una noticia o como en este caso, mi mujer me cuenta una historia que a su vez le han contado, y automáticamente se me ocurre… Me pareció que podía ser una especie de drama, sobre esta pobre mujer que pasa por esta situación, y que podía tener todos los elementos de una tragedia griega ¿no? Una heroína griega que tiene potencial pero que se hunde en sus propias debilidades y fallos, y bueno, trabajé en ello”.
De Manhattan a San Francisco
El director neoyorquino traslada la acción de Manhattan a San Francisco y, puesto que es algo extraordinario que salga de la Gran Manzana, le preguntamos sobre el por qué de su elección. La respuesta no podía ser más sencilla: “La verdad es que podía haber tenido a Cate Blanchett trasladándose a casa de su hermana en cualquier lugar, en Tejas, en Colorado, en Alabama, en cualquier sitio… Pero pensé: sea donde sea que ubicase a su hermana voy a tener que vivir allí por un tiempo, y no quiero vivir en un sitio en el que después de una semana no me guste nada, y pensé si podría vivir en San Francisco un tiempo».
Habrán reparado en que Allen es un hombre con una visión de la vida muy pesimista. Eso por un lado, por otro es incombustible. En el momento en el que hablaba con nosotros sobre Blue Jasmine ya estaba preparando la posproducción de otra película que ha terminado de rodar.
Y ¿por qué un hombre con el éxito ya asegurado tiene la necesidad de rodar una película tras otra, de manera incesante? “Para distraerme, la vida es muy cruel, muy difícil, muy dura, y por eso trabajo, y así puedo estar todo el año, fuera de la vida real, pasando el tiempo con personajes de ficción, no sé, gente que es guapa, encantadora, talentosa, trabajo con vestuarios, música y me da la oportunidad de evitar las dificultades de la vida, la mayor parte al menos, mi visión de la vida es efectivamente muy pesimista y esta es una de las razones por las que trabajo tanto”.
Cate Blanchett, una actriz «excelente»
Blue Jasmine es un filme que no alcanzaría el climax que tiene sino fuese por Cate Blanchett y por su capacidad de interpretación. Así lo piensa también Woody Allen, que admite que fue la primera que le vino a la mente para representar el papel y se sintió muy feliz al saber que estaba disponible.
“Hace muchos años, cuando vio la película El talento de Mr. Rippley, pregunté: ‘¿Quién es esta chica, quién es esta mujer? Es una actriz que se llama Cate Blanchett, no es muy conocida’… A mí eso me daba igual y pensé que era muy buena, así que empecé a ver sus películas. La seguí durante años y es una actriz excelente. Pensé para mis adentros que hay pocas personas con las que me gustaría trabajar en mi vida, pero Cate Blanchett es claramente una de ellas”.
Suerte la de ambos y la de los espectadores, que podemos disfrutar de dos grandes del séptimo arte unidos en la gran pantalla. No sé si será una de las mejores producciones en décadas del Sr. Allen, como afirman algunos, pero desde luego cumple los requisitos para aportar y plantear una conversación, un debate, un intercambio de opiniones y visiones del por qué de las cosas. Para mí, esa es la magia del cine y de Woody Allen.