Los bomberos, ejemplo de abnegación, lealtad y sacrificio

, 22 de agosto de 2013

Coatzacoalcos, Ver., 22 de agosto de 2013.- Con botas, chaleco, capa y casco protector, día a día los bomberos arriesgan la vida, ya que el fuego y las contingencias no dan tregua. El reconocimiento poco importa cuando se tiene una meta con valores bien fundados como abnegación, lealtad y sacrificio.

Ser bombero implica una gran responsabilidad y dedicación, por ello el equipo de Más Noticias se aventuró a seguir la jornada de los bomberos, viviendo minuto a minuto las 24 horas de guardia y a la espera de cualquier emergencia.

Durante el día los acompaña la luz del Sol, pero la guardia dura hasta la noche. Pasadas 20 horas no resta más que descansar en la sala de video o el dormitorio.

”Como yo soy el que manejo, siempre estoy al pendiente, aunque en descanso aprovecho para ver aquí las noticias”, explica Roberto Hernández Cortés.

Pero el descanso es interrumpido por una llamada de auxilio a la Central de Radio que de inmediato activa la alarma…

– Servicio de bomberos buenas noches…en un momento salimos para allá- se escucha decir al operador.

Es así como de inmediato los bomberos inician la acción, primero colocándose el traje de seguridad que pesa más de cinco kilos, y el doble si se moja. Debe ponérselo en menos de un minuto, pues para los bomberos los segundos valen más cualquier cosa.

No siempre llegan rápido, pues hay conductores que no ceden el paso, ni escuchando la sirena de la unidad, por eso los bomberos saben que deben salir de la estación lo antes posible.

”Desde que uno está durmiendo y suena la sirena tenemos 40 segundos para ponernos el equipo. El transcurso en llegar a la unidad es menor porque un minuto después de la llamada la unidad tiene que estar saliendo de la estación”, explica Jesús de la O Martínez.

Por más que se compliquen las emergencias los bomberos nunca se dan por vencidos, menos cuando hay vidas que rescatar y a pesar de que esto signifique arriesgar su propia vida.

No gozan de un descanso o días festivos, pues trabajan las 24 horas de los 365 días del año.

No los espanta el fuego, el sol, ni mucho menos la lluvia, pues más de uno ha sentido la muerte de cerca.

Su experiencia, capacidad y trabajo en equipo hacen del Heroico Cuerpo de Bomberos de Coatzacoalcos una gran familia donde no importa arriesgar la vida por el compañero.