Arancel a tomate mexicano pone en riesgo al agro mexicano
Notimex (Carlos Trejo), 9 de mayo de 2019
México.- La aplicación del arancel al tomate mexicano —que inició el pasado martes— “abre la puerta” para poner en riesgo a otros productos agrícolas en Estados Unidos, aseguró el vicepresidente de Frutas y Hortalizas del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), Sergio Esquer.
La decisión del Departamento de Comercio de Estados Unidos «sí puede ser un antecedente negativo para abrir la puerta (a otros alimentos agrícolas). Este riesgo es latente y siempre ha estado, pero esto lo abre más”, argumentó en entrevista con Notimex.
La eliminación del acuerdo de suspensión a la investigación antidumping del tomate, que estaba suspendido desde 1996, contamina aún más la relación comercial con el país vecino del norte, principal destino de los productores agrícolas de México, sostuvo.
Ello, porque los productos agrícolas mexicanos comenzaron a adquirir mayor fuerza conforme fue avanzando la implementación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), vigente desde 1994, y se espera sea sustituido por el nuevo acuerdo negociado desde agosto de 2017.
Esquer afirmó que las berries —arándano, frambuesa, fresa y zarzamora—, los pimientos, las berenjenas y los pepinos son algunos de los alimentos del campo expuestos a un riesgo similar.
La investigación dumping se da mucho en perecederos y cuando hay mucha sobreoferta en ciertas épocas del año, da paso a sospechar de la venta del producto por debajo del precio establecido; y “en los berries puede hacerlo sin problemas”, explicó.
“El hecho de que Estados Unidos haya cambiado las reglas para el tomate, sería muy mal precedente, y sí nos preocupa que también pudiera venirse para las berries”, apuntó Aldo Mares, presidente de la Asociación Nacional de Exportadores de Berries (Aneberries).
Comentó que la petición de imponer una cuota compensatoria ha venido de Florida desde que comenzaron las negociaciones para modernizar el acuerdo comercial de Norteamérica, pues es uno los mayores productores de fresas, superado solo por California.
La insistencia ha sido manifestada a través de algunas cartas y, aunque no han tomado mayor relevancia del otro lado de la frontera norte, “nos preocupa como industria y lo estamos evaluando constantemente”, refirió recientemente a Notimex.
Ante ese panorama, Esquer hizo mención en la urgencia de abrir otras fronteras para comercializar el tomate con otros países de Asia y Europa, por ejemplo, para salir del confort y reducir la dependencia con el país gobernado por Donald Trump, y aseguró que desde México se trabaja en los protocolos sanitarios para ello.
Respecto al precio y sobreoferta del tomate en el país, el representante del CNA pidió esperar unos días más para evaluar la situación real sobre cuánto se podría dejar de exportar al otro lado de la frontera.
Destacó que aún es prematuro decir cuánto producto quedará en el país, sobre todo, porque han transcurrido dos días de haber llegado la notificación oficial del Departamento de Comercio de Estados Unidos a los firmantes del acuerdo y a las aduanas.
Pero lo importante es continuar con las negociaciones y llegar a una conclusión lo antes posible porque, de tener una respuesta favorable, hay un periodo de 30 días para tener comentarios y vuelva a entrar en vigor el acuerdo, refirió.
“Por ahora se pagará la cuota compensatoria provisional (de 17.5 por ciento) para seguir con los envíos, pero es conveniente firmar un acuerdo lo más pronto posible para reducir la carga financiera para los exportadores mexicanos”.
De acuerdo con la Secretaría de Economía (SE), el anuncio del martes pasado implicará un costo anual superior a 350 millones de dólares para exportadores mexicanos de tomate y se espera que pequeños y medianos exportadores se vean imposibilitados de hacer frente a esta carga financiera.