Corrupción y enriquecimiento ilícito ya son delitos graves: Ricardo Ahued

Leticia Silva, 6 de febrero de 2019

Xalapa, Ver.- Ricardo Ahued Bardahuil, senador de la República, aseguró que se han realizado diversas reformas constitucionales para catalogar como grave los delitos de corrupción y enriquecimiento ilícito de servidores públicos.

Dijo que a partir de ahora es delito grave asaltar en carretera, el robo de combustible o gasolina, la posesión de armas de alto poder que sean de uso exclusivo del ejército; y sobre todo es delito grave la corrupción y el uso de recursos públicos que ocasionen daño patrimonial.

Manifestó que todos esos delitos se perseguirán de oficio y se castigarán con prisión preventiva.

“Por primera vez en este país, que se constituye como delito grave la corrupción,  se anexaron 13 artículos para que tengamos más protección los mexicanos y lleva un proceso. En el momento en que se aplique, muchos le van a pensar, hoy que lo sepan los del PRI, los del PAN, los de Morena y todos los que estamos en la función pública, la corrupción, hoy es cárcel y van a ver que pronto el presidente dará un manotazo, y ya lo dijo, nos lo dijo a senadores y diputados de Morena, si tengo que empezar por casa, para dar un manotazo y que vaya a la cárcel un corrupto de mi partido, lo voy hacer”.

Dijo que no debe alarmarnos las medidas, que para muchos son cuestionables, sobre todo para aquellos que hoy están preocupados porque no podrán hacer uso indebido del erario público y ampararse en la impunidad y corrupción.

“Estaban muy contentos de todos los colores y de todos los sabores. Coludidos   sectores empresariales y políticos, muy calladitos se robaron el dinero de los campesinos, quitándole el 50 por ciento de los proyectos productivos, se robaban el dinero de las medicinas, y medicamentos y no pasaba nada…saqueaban a los estados, a los  municipios, saqueaban a la federación y bueno el presidente tomo el toro por los cuernos”.

Refirió que la señal es clara, por lo que acotó que es importante que el país entre en una inercia de moralidad y de rectitud, de lo contrario se seguirán fabricando pobres.