Caravana de migrantes se mantiene en el municipio de Juan Rodríguez Clara
Fluvio Martínez, 12 de noviembre de 2018
Coatzacoalcos, Ver.- Las caravanas de migrantes continúan cruzando territorio veracruzano, para llegar a la frontera con Estados Unidos.
En esta ocasión, son más de 2 mil indocumentados, en su mayoría, de El Salvador, quienes desde la noche del pasado domingo se encuentran en el municipio de Juan Rodríguez Clara: “vamos a buscar beneficios para nuestra familia, porque la situación esta muy difícil en El Salvador”.
Algunos, descansaban en el pasto y otros buscaban sombra entre los arboles, dentro de la ganadera local, que fue el lugar que les proporcionaron las autoridades municipales para detenerse. Han recorrido entre 3 y 4 semanas, desde que salieron de sus hogares.
Como en muchos casos, vienen adultos, jóvenes, madres solteras con niños, como Claudia Estrada: “es muy difícil y muy complicado, porque a veces andamos al aire libre en el sol y no tenemos donde quedarnos, por lo menos hoy gracias a Dios nos dieron donde quedarnos, pero antes nos quedamos en una cancha al aire libre”, señaló.
Además del cansancio, la incertidumbre también se percibía en este lugar.
Los migrantes no sabían como se trasladarían a la Ciudad de México, que es su próximo destino.
Hasta que llegó el padre Alejandro Solalinde, quien les propuso trasladarse en camiones, que el gestionaría: “ya hubo una persona que ya puso dos camiones y estamos viendo ahorita que se sumen mas, hasta que cubramos los camiones que necesitamos”.
Se necesitan 34 camiones para mover a los mas de 2 mil indocumentados y hasta el mediodía se habían confirmado menos de cinco.
El fundador del albergue “Hermanos en el camino” aseguró ante los medios de comunicación, que por seguridad, no es recomendable que continúen con su recorrido a pie: “quisiéramos que se fueran todos juntos para mayor protección, pero sino se puede los mandaremos en lotes, pero sí con el acompañamiento hasta llegar a la Magdalena Mishuka, no queremos exponerlos”.
El mensaje tranquilizó por un momento a las personas.
Norma Carolina ha viajado con la caravana desde hace tres semanas, asegura que la convivencia no ha sido tan difícil, a pesar de los conflictos que en ocasiones se generan entre los grupos: “tratamos de comportarnos, y los que están desordenados les hablamos y sí hacen caso”.
Hasta la tarde del lunes, los migrantes permanecían en Rodríguez Clara en espera de los camiones para seguir con su camino.